Para Yulieth Porras Osorio, gerente general de Energía de Pereira, el éxito de una compañía se concibe desde la sinergia entre lo social, ambiental y económico; un reto que pocas empresas están dispuestas a desarrollar y más cuando sus bases son netamente financieras.

Desde hace ya varios años, Energía de Pereira ha venido cambiando en el imaginario de los pereiranos lo que solía ser una empresa con deficiencias económicas y de infraestructura a ser una de las empresas de la ciudad con mayor visión en los entornos ambientalmente sostenibles y financieros, pues hoy es una de las compañías que más utilidades entrega al municipio de Pereira, propietario del 51 % de las acciones.

Desde que la compañía decidió cambiar su perspectiva empresarial, siendo sostenible en la creación de valor a largo plazo, ha logrado mejorar el uso de los recursos y la gestión entre los gastos y los costos, generando utilidades que año tras año superan las expectativas y las metas trazadas. Muestra de ello es el balance que entrega en su gestión del 2018.

Antes del proceso de capitalización en el 2008, la empresa tenía pérdidas acumuladas superiores a los 36 mil millones de pesos; el municipio no recibía utilidades, todo lo contrario, buscaba recursos para sostenerla; estaba a punto de ser intervenida por parte de la Superintendencia.

Hoy día el municipio no solo está recibiendo más de 14 mil millones de pesos en utilidades, sino que además es propietario de una de las empresas con menor indicador de pérdidas, mejor eficiencia operacional y calidad del servicio en el país.

Estas cifras no solo se logran con una buena gestión sino también con el compromiso irrestricto de los colaborares, cuyo objetivo es que la empresa preste un excelente servicio, vital para el crecimiento. Este sentido de responsabilidad se ve reflejado en el clima laboral, superior al 96 %, lo cual evidencia que los colaboradores se han apropiado de su empresa.

“Nuestro propósito deriva no solamente de las funciones que hagan los colaboradores, que estén bien hechas y que aporten a unos resultados financieros, sino también a una felicidad empresarial, alineados con los sueños de esta empresa pereirana y articulando los sueños personales con los laborales, donde Energía de Pereira construye liderazgo y lo conjuga con el bienestar familiar. La apuesta es mantener el equipo comprometido, mejorando cada día sus competencias”, afirma la gerente general.

Desarrollo Humano y Organizacional es la dependencia donde se tejen todas las estrategias fundamentales y necesarias para brindar prosperidad y estabilidad laboral, pues en la actualidad la EEP genera 210 empleos directos y más de 300 indirectos.

A nivel financiero, la empresa superó al 100 % sus metas, haciendo una buena gestión a nivel operativo, entre los costos y los gastos, reflejándose en un Ebitda de $58.649 millones, ocho puntos más respecto al 2017 y 1.191 % más que en el 2007 que fue de $4.542 millones de pesos. En cuanto a los ingresos operacionales, también superó el 8%, alcanzando los 264.580 millones de pesos.

Con relación a la satisfacción del cliente, los resultados fueron buenos; si bien el 2018 fue un año complejo para el sector eléctrico a causa de la problemática de Hidroituango, que afectó en general la percepción de los usuarios frente al servicio eléctrico en el país, Energía de Pereira logró ocupar el tercer puesto a nivel nacional en la encuesta CIER, Comisión de Integración Energética Regional.

La base fundamental para obtener dichos resultados está en atender la estrategia implementada desde el 2016 que tiene como visión hacer de Energía de Pereira la mejor empresa pereirana para el 2020, donde la coherencia y el trabajo en equipo se reflejen en la articulación con los diferentes grupos de interés: colaboradores, accionistas, entes de vigilancia y control, trabajando de la mano con toda la comunidad en pro del desarrollo de la ciudad.

“Pero para ser la mejor empresa en el 2020 nos fundamentamos en el desarrollo sostenible, logrando un equilibrio entre lo social, económico y ambiental, generando valor a los diferentes grupos de interés, de la mano de nuestros aliados estratégicos”, agrega la directiva.

En ese sentido, existen los programas de responsabilidad social con los que se ha impactado a más de 14 mil personas, dejando atrás la filantropía y entregando a la comunidad la formación necesaria para crear empresa o, a un público objetivo como los niños, la pedagogía que requieren para entender cómo funciona la energía eléctrica y cómo ellos son un agente importante para la conservación de los recursos naturales. Desde la parte ambiental, se enfocan en la reforestación y el cuidado del ambiente, específicamente la conservación de la cuenca del río Otún.

El ahora

Hoy Energía de Pereira no está pensando en vender energía, está pensando en vender soluciones energéticas a sus usuarios, a través de cambios tecnológicos, promoviendo la movilidad eléctrica sostenible que brinda una alternativa de transporte limpio y económico, ofreciendo la instalación de sistemas solares fotovoltaicos que permitan tener ahorros considerables en el corto y largo plazo, soluciones amigables con el medio ambiente, beneficiando a la comunidad en general. De eso se tratan los nuevos negocios que viene consolidando desde el 2017.

Instituciones tan importantes como el colegio Pino Verde y la Universidad Tecnología han creído en estos proyectos y por ello en la actualidad cuentan con sistemas solares que suplen hasta un 30 % el total de su demanda de energía.

La sinergia

“Los logros son dados a una visión estratégica desde la alta gerencia, que ha podido generar credibilidad ante la junta directiva y sus colaboradores, manteniendo la visión clara de lo que se quiere, siendo coherente con lo que se promulga. Una estrategia que ha permeado todos los rangos de la compañía, desde los cargos directivos hasta los técnicos”, indica Nilton Cesar Tangarife, Gerente de Direccionamiento y Control Estratégico de la empresa.

Según los directivos de Energía de Pereira la alta gerencia ha generado un liderazgo basado en la confianza, empoderamiento y respeto, principales valores éticos y morales que acoge esta compañía. “Esta es la base del éxito, obviamente soportado en una estrategia clara con las necesidades del entorno, y no solo con lo que requiere la ciudad sino el mundo, donde se garanticen los recursos necesarios para las futuras generaciones” agrega Tangarife.

El futuro

“Hacer realidad la visión, consolidados como la mejor empresa pereirana por sus estrategias innovadoras, entregándole al municipio altos resultados financieros como hasta ahora se ha hecho, seguir potencializando el talento humano, entre otras cosas. Que vean a Energía de Pereira como el mejor lugar para trabajar en la ciudad, con calidad humana. Así nos vemos a futuro” finaliza la gerente.

Comunicaciones Energía de Pereira